La crisis eléctrica no es un tema del pasado. Al menos, para los comerciantes del país todavía es uno de los obstáculos que perjudica al sector terciario de la economía. Según Consecomercio 79,7% de los comerciantes indica que no ha superado la crisis energética en sus regiones y que esta sigue afectando negativamente sus actividades.
De acuerdo a la "consulta de coyuntura" del tercer trimestre de 20010, elaborada por el Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), un 79,7% de los comerciantes consultados afirmó que aún sufre los efectos de la crisis eléctrica.
"Se nos había ofrecido su solución definitiva, pero el 79,7% de los prestadores de servicios y comerciantes en Venezuela siguen indicando que no han logrado superar la crisis energética en sus regiones y que esta sigue afectando negativamente sus actividades", afirmó Fernando Morgado, presidente de Consecomercio.
Y es que las cifras del estudio que incluyó a comerciantes agremiados en 200 cámaras regionales difieren del discurso oficial. En junio pasado el Presidente de la República anunció el fin de racionamiento eléctrico ante la recuperación de la cota de la central hidroeléctrica del Guri.
"Ahora estamos saliendo de la dieta eléctrica, salimos fortalecidos (...) hemos superado la grave crisis eléctrica de finales de 2009 y el primer semestre de 2010. Esto no significa que no estemos en riesgo. Hemos asumido conciencia, debemos continuar con el uso racional de la electricidad y la campaña de ahorro", aseveró Hugo Chávez el 10 de junio.
Al discriminar el sondeo de Consecomercio, se observa que de los 19 subsectores estudiados todos afirman mayoritariamente que los problemas con el suministro de electricidad persisten.
Áreas como las de equipos y telecomunicaciones, automotriz y autopartes son las más afectadas. Un 90% de los consultados de esos tres subsectores sostienen que no han superado la crisis energética.
En el caso de los subsectores de equipos médicos, servicios aduaneros, línea blanca y marrón, vestido y calzado, supermercados y afines, lavanderías y tintorerías, así como talleres mecánicos, el índice de los que reportan limitaciones a causa de las fallas eléctricas oscila entre un 80% y 88%.
En franquicias, panaderías, ferreterías, farmacias y restaurantes los niveles de quienes sostienen que el mal servicio eléctrico es una de sus principales trabas se ubican entre un 60% y 76%.
Aunque reconoció que en Caracas la crisis eléctrica no tiene mucho impacto, Morgado explicó que en el interior, especialmente en las entidades orientales y en el estado Falcón la situación es compleja.
Asimismo, indicó que a diferencia del primer semestre del año donde los cortes del servicio eléctrico eran programados, en el tercer trimestre del año volvieron las interrupciones no planificadas. "Han vuelto los cortes desprogramados", apuntó el directivo.
Igualmente, destacó que los pequeños y medianos comercios han tenido que hacer esfuerzos para adquirir plantas eléctricas, perdiendo así la posibilidad de invertir esos recursos en la mejora de activos o la reposición de inventarios.
Mirando al próximo año
Otros gremios empresariales han advertido que una eventual recuperación económica para 2011, tal y como anuncia el Ejecutivo, dependerá de la calidad del servicio eléctrico.
"Habría que mirar cómo han mejorado las inversiones en materia eléctrica, pero sin duda, que será un elemento a analizar dentro de la curva y la ecuación de crecimiento del país", señaló recientemente Miguel Pérez Abad, presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Artesanos Micros, Pequeñas y Medianas Industrias y Empresas de Venezuela (Fedeindustria).
Aristimuño Herrera & Asociados/El Universal
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