4 regalitos para esta navidad

Estas fiestas navideñas sea original. Olvídese de la corbata, de la colonia y demás regalos tradicionales y apueste por regalar rentabilidad. Le proponemos cinco regalos financieros que sorprenderán a su familia y le harán quedar muy bien.

Cuenta de ahorro para la universidad del más pequeño

El benjamín de la familia empezará el curso que viene la ESO y empieza a ser momento de pensar en sus estudios universitarios. Si nos decidimos a ir ahorrando poco a poco para ese momento, lo mejor es mirar un producto financiero que permita obtener, además, otras ventajas de ese esfuerzo de ahorro. Las cuentas para niños suelen ser una buena solución. Muchas cajas y bancos tienen productos similares, por lo que es conveniente estudiar las prestaciones de cada uno. Normalmente, tienen asociado un seguro de vida familiar: si le pasa algo a alguno de los padres al que vaya suscrita la cuenta, el hijo recibirá de un ingreso en dicha cuenta de la prima del seguro. Además, no suelen tener comisiones, excepto la de cancelación, que suele ser elevada si se retira el dinero antes de la edad que se estipule en el contrato, entre los 16 y los 18 años. Otra cualidad de estos productos es que no exigen un saldo mínimo ni aportaciones regulares a los padres.

Un regalo de ¡oro!

El pasado mes de septiembre, el Hotel Palace de Madrid puso a disposición del público una máquina expendedora de oro que permite adquirir monedas de oro y lingotes de uno, cinco y diez gramos, incluso empaquetarlos para regalo. Está claro que el oro es uno de los activos de moda, así que no deje pasar la oportunidad para hacer un regalo de lo más brillante. Desde los mínimos de noviembre de 2008, 700 dólares, la onza de oro ha duplicado su precio, hasta los 1.422 de noviembre de 2010. Actualmente se sitúa en los 1.390 dólares por onza y, según los expertos, de mantenerse la incertidumbre sobre el desarrollo de la recuperación económica, el entorno debería seguir siendo favorable para el metal amarillo. Si desea adquirirlo de forma física, tenga eso sí mucho cuidado con quién realiza la transacción. En España, Oro Direct es pionera en España en ofrecer a los particulares la posibilidad de invertir en oro físico de manera sencilla. El lingote más barato cuesta 59 euros, el más caro 34.500 euros. En la propia Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre también se pueden adquirir monedas de oro de diversas colecciones.

Un plan de pensiones para su cónyuge

Tan valioso como un diamante, aunque de momento su cónyuge no lo aprecie del todo. La reforma de las pensiones va a cambiar las previsiones de ahorro de muchos españoles que rondan los 45 años. Sobre todo de aquellos que planeaban empezar a cotizar al máximo en los últimos 15 años y pensaban que todavía les quedaban cinco años para aportar al máximo a la Seguridad Social. Es muy posible que desde el próximo enero los años para calcular la base reguladora de la pensión pública se amplíen a de 15 a 20. Ahora que tiene que compensar la supresión de la deducción de los 400 euros en el IRPF, quizá sea la oportunidad de hacer un buen doblete. Proporcionar a su pareja más tranquilidad con un plan de pensiones que hasta ahora no se había decidido a empezar y, de paso, desgravar a Hacienda por aportación al plan del cónyuge, hasta 2.500 euros anuales.

Cuenta vivienda para rehabilitación

El actual régimen fiscal de las cuentas vivienda desaparece para quienes no hayan adquirido una vivienda antes del 31 de diciembre de 2010. Pero un contribuyente se puede seguir beneficiando de la deducción del 15 % sobre las cantidades invertidas (con un máximo anual de 9.040 euros), si ese dinero se destina a la rehabilitación de una vivienda. No desperdicie la oportunidad de sacarle el máximo partido a una de las deducciones más atractivas que existen en el actual escenario fiscal. Aporte el máximo dinero legal posible a su cuenta vivienda (recuerde: no es necesario que tenga esta denominación, sino que puede indicar a su banco que su cuenta vivienda figure como alguno de los depósitos que tiene en su cartera) y destínelo posteriormente a la rehabilitación.