Las cifras de la Superintendencia de Bancos señalan que el rompecabezas público, compuesto por los bancos Venezuela, Bicentenario, Industrial, Tesoro y Agrícola controla al cierre de febrero de este año 70% de los depósitos del Estado, cuando doce meses atrás sólo dominaba 53%.
"Hay que tomar en cuenta que el Estado ha incrementado su tamaño en la economía, empresas muy importantes como Cantv, La Electricidad de Caracas, Sidor, ahora son públicas y por tanto se restringe de una manera importante el ámbito de actuación de la banca privada", dice el presidente de una entidad financiera que prefiere reservar su nombre.
En parte la concentración se explica por la estatización del Banco de Venezuela y el nacimiento del Bicentenario, entidad que agrupa a los antiguos Banfoandes, Central, Bolívar y Confederado, pero es evidente la decisión del Gobierno de controlar más activamente los recursos que emanan de ministerios, gobernaciones, alcaldías y empresas públicas.
Al concentrar los bolívares en entidades que se encuentran bajo su mando, el Ministerio de Finanzas puede obtener recursos para cubrir gasto del Gobierno con extrema facilidad vendiéndole a estos bancos bonos y letras del tesoro.El surgimiento del Gobierno como el principal banquero del país ha puesto en marcha una acelerada recomposición en el destino de los depósitos del Estado, un elemento clave para que un segmento del sistema financiero mantenga la liquidez adecuada.
Los últimos dos meses son elocuentes. Entre diciembre y febrero la banca pública aumentó la inversión en letras del tesoro y bonos, que emite el Ministerio de Finanzas, en 49% y 10,60%, respectivamente.
El lunes de esta semana, el Ministerio de Finanzas anunció que el Banco Industrial de Venezuela y el Banco del Tesoro comprarán bonos por el orden de 3 mil 500 millones de bolívares, a fin de que el Ejecutivo cumpla con gastos previstos en el presupuesto de este año.
De hecho, el Banco Industrial de Venezuela y el Bicentenario centran su actuación en la compra de bonos y letras, más que en la entrega de créditos.
Al cierre de febrero de este año las inversiones en bonos y letras del Banco Industrial ascienden a 7 mil 168 millones de bolívares y el total de préstamos tan solo se ubica en 910 millones de bolívares.
Al mismo tiempo, en el Bicentenario las inversiones en bonos y letras representan 26 mil 224 millones de bolívares y el portafolio de préstamos es de 9 mil 056 millones.
Un factor a tomar en cuenta es que la calidad de los préstamos en la banca pública es muy inferior al de las entidades financieras privadas.
En promedio, los bancos privados tienen retraso en el pago de 1,63% de la cartera de créditos, mientras que en el Banco Industrial la relación es de 31,50%, en el Bicentenario 19,14% y en el Banco Agrícola alcanza 26,44%.
Si bien en términos generales la banca tiene en este momento exceso de liquidez, ejecutivos financieros explican que los bolívares no se reparten de manera equitativa en el sistema y los bancos que tienen una base de clientes reducida pueden verse afectados por la concentración de los depósitos del Estado.
Todo indica que la concentración de los depósitos del Estado seguirá en aumento.
vsalmeron@eluniversal.com
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