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junio 21, 2011

Historia de emprendedores venezolanos: PLOP

Con base en 10 mitos del contenido viral, atribuidos a College Humor, recomendaron a las marcas no abusar del tiempo de los internautas; utilizar voceros o páginas que sirvan como detonantes; que si bien las cosas son virales, o no, existen tácticas para lograr este efecto, y una de ellas es mantener la calidad de los productos; y que no subestimen el poder de lo que ya existe, como Facebook, ni el de los medios tradicionales de comunicación, para complementar las campañas."Siempre bromeamos con que 'el señor Sony' llamó desde Japón cuando salió el episodio; porque inmediatamente ordenaron reformular la serie para que le quitaran las alusiones políticas. Eso la condenó a su desaparición", palabras más, palabras menos, explicó Graziani. .Cuando los jóvenes creadores de la extinta serie animada de Sony Entertainment, Nada que ver, descubrieron el efecto viral de la controversia en Internet comenzó una historia que hoy acumula éxitos como El Chigüire Bipolar y el popular seriado La Isla Presidencial. 

Plop surgió como empresa en 2006 para producir durante tres años 12 capítulos de la serie Nada que ver. Pero no fue sino hasta su salida del aire por las presiones y críticas por Internet que generaron referencias a la vida sexual de la expresidenta chilena, Michelle Bachelet, cuando Oswaldo Graziani y Juan Ravell se dieron cuenta de que allí había potencial. 

Y Ravell lo completó: "Nunca más la serie animada volvió a tener el impacto viral que le dio la controversia". 

Tras confesar que se quedaron "picados" -término venezolano para referirse a ofendidos- luego del traspié con al multinacional nipona, y para "hacerles creer a nuestras madres que estábamos haciendo algo", Graziani y Ravell se concentraron en darle vida a la página en Internet El Chigüire Bipolar y, en 2010, al seriado animado on line La Isla Presidencial.

De hacer 12 episodios de 30 minutos cada uno de Nada que ver, pasaron a producir un episodio de máximo 6 minutos de La Isla Presidencial cuando podían. Esta vez sin las barreras del "control sobre el contenido" y de las diferencias del "bagaje cultural entre los países Latinoamericanos". 

Experiencia criolla

Graziani cuenta que el primer episodio de La Isla Presidencial ha sido visto por 3 millones de personas, mientras que los cinco capítulos que hasta hoy integran la serie superan las 12 millones de visitas.

Tanto él como Ravell consideran que el éxito de este seriado se debe a que existía una audiencia ávida de contenidos de humor político en Venezuela y en la región.

Los creativos reconocen que sin el público que habían logrado previamente con El Chigüire Bipolar a través de redes sociales, como Facebook y Twitter, no hubiesen podido posicionar en tiempo récord la serie animada o el festival Ni tan nuevas bandas. Que en una semana del lanzamiento los llamaran de medios internacionales como EFE, Reuters, The New York Times y El Clarín también contribuyó con el efecto de "bola de nieve". 

Y es por toda esta experiencia que en la retransmisión local del World Innovation Forum que se hizo recientemente en el Iesa, los creativos desmitificaron algunos conceptos asociados al marketing viral, la razón de ser de Plop. 

"La gente se acerca a tu marca, porque quiere ver un contenido interesante. Eso es mercadeo viral", dijo Graziani. 


Sharay Angulo El Mundo

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