El Ministerio ruso de Agricultura pronostica que este año Rusia recogerá por lo menos 80 millones de toneladas de grano y se prevé que las exportaciones alcanzarán los 14-17 millones de toneladas. Desde el 1 de julio Rusia reanuda las exportaciones de cereales al mercado mundial. La decisión de detener las exportaciones fue tomada por el Gobierno ruso el 15 de agosto de 2010 como una medida necesaria en el contexto de la sequía y los incendios de 2010 tras la pérdida de más del 30% de la cosecha. La decisión de reabrir la exportación fue tomada el 28 de mayo de este año.
En el XV Foro Económico Internacional de San Petersburgo las autoridades rusas llamaron la atención de la comunidad empresarial sobre el hecho de que la prohibición de venta de grano en el mercado internacional fue una medida necesaria y Rusia es conciente de la responsabilidad de garantizar la seguridad alimentaria mundial.
El objetivo del cese de las exportaciones fue evitar que el mercado interno sufriera carencias y que aumentaran los precios de los alimentos.
En la nueva temporada Moscú exportará cereales a los compradores tradicionales en los volúmenes requeridos.
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