Aseguró que el crecimiento del PIB que se refleja en el último informe del BCV es en gran parte "gracias al esfuerzo que sigue haciendo el sector privado por atender la oferta de bienes y servicios a la población, aún en condiciones muy adversas".Asimismo, dijo que los Ministros no han explicado las razones de lógica económica que permitan corroborar el crecimiento registrado durante el primer trimestre de 2010. Opinó que se trata de un "rebote estadístico" luego de dos años de recesión, no sostenible en el tiempo e impulsado por el inicio del gasto electoral del gobierno.
Por otro lado, dijo que en el caso específico del sector construcción, la mayor parte de las empresas han pasado a manos del Estado y aún así "no se ha percibido el verdadero impacto que debería obtenerse como gran generador de empleos directos.
Para lograr mayores resultados y un mejor impacto en la economía es necesario que se promueva una mayor participación privada en la construcción de viviendas de interés social. Llama la atención también que el sector petrolero, que está en manos del Estado, fue uno de los que sufrió caída".Explicó que las cifras han sido comparadas con el primer trimestre de 2010 cuyo comportamiento fue muy negativo (-5,3%). Además hay que resaltar que el sector petrolero decreció y que de los 16 sectores que evalúa el BCV, 10 están por debajo de la base 100 del año 1997. Por tanto, todavía no podemos hablar de un verdadero crecimiento y es evidente que no hay uniformidad en la recuperación desagregada por sectores".
¿Bienestar Social?
"Aceptamos que el Gobierno Nacional ha hecho un esfuerzo en la transferencia de recursos a las clases sociales de menores ingresos, pero eso no se ha traducido en mayor bienestar social para la población por dos razones fundamentales, la primera porque la inflación promedio de 30% de los últimos años deteriora significativamente el "ingreso familiar", de hecho en reciente estudio realizado por la UCAB se determina que el 67% de los venezolanos tiene un ingreso precario", comentó el dirigente gremial.
La segunda razón importante que señaló es que la tasa de desocupación del cierre del primer trimestre del 2011 es muy similar a la del mismo período del 2010. Es decir, el crecimiento no se traduce en más empleo.
El efecto precio
Álvarez consideró que el PIB registrado tiene un efecto precio que lo eleva, a pesar de que los cálculos son reales (descontado inflación), en virtud de que la distorsión de precios relativos por regulación, control y escasez, hace que la demanda no depure su efecto completamente. El efecto precio se refleja por las compras externas del gobierno, importaciones alimentos y otros componentes y materias primas.
"Recordemos que el Gobierno es el mayor importador de nuestra economía. Es evidente entonces, en el informe sobre PIB del primer trimestre, que la expansión de la demanda agregada del sector gobierno, refleja más un efecto precio".
Problemas estructurales
Una vez más insistió en que los problemas estructurales de la economía se mantienen. "Venezuela es un país donde el crecimiento de la economía es atípico. Especialmente en el Socialismo del Siglo XXI, que se caracteriza por una economía estatista y rentista, donde la política económica del Gobierno está orientada a reducir o anular la actividad privada y hacer más grande el tamaño del Estado. Se va en contra sentido de las principales economías del mundo que otorgan más libertad a la sociedad para interaccionar y desarrollarse en busca de la prosperidad y el bienestar social".
"En nuestro país la tendencia a decrecer es difícil de revertir, porque las políticas públicas dificultan el desempeño de la actividad empresarial, creando un entorno hostil caracterizado por la inseguridad jurídica, que se expresa diariamente en leyes, confiscaciones, control cambiario y de precios, exageradas permisologías. Todo ello aleja la inversión local y foránea. Mantener los niveles de crecimiento económico no es posible sin altos niveles de inversión (opuesto a altos niveles de gasto). Es fundamental que se generen puestos de empleos dignos y sostenibles en el tiempo y concertar leyes que tienda a la formalización de la economía y estimulen la inversión privada", precisó Álvarez.
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