SENTIMIENTO COMPRADOR EN LAS BOLSAS
El parqué americano abrirá con alzas en torno al 0,8%. Discretos resultados de J.P. Morgan, que pincha en ingresos. El mercado se echa en manos de Bernanke.
La Bolsa de Nueva York abrirá la sesión con alzas en torno al 0,8%, según apuntan los futuros del S&P 500. Los resultados de J.P. Morgan han sido mejores de lo previsto en beneficio pero peores en ingresos, por lo que han tenido una fría acogida. Sin embargo, los inversores confían en los planes de alivio cuantitativo que sugirió ayer la Reserva Federal. Y en las buenas cifras de Intel.
La temporada de resultados ya está a toda máquina. Y hoy le ha tocado el turno al primer gigante bancaro de Estados Unidos, J.P. Morgan, cuyas cifras han tenido una acogida muy discreta.
En concreto, la entidad americana acaba de anunciar que su beneficio del tercer trimestre se situó en 4.420 millones de dólares, o 1,01 dólares por acción, lo que supone un 23% más que los 0,82 dólares obtenidos en el mismo periodo del año pasado. La cifra supera los 0,88 dólares esperados por el consenso de analistas.
No obstante, la alegría no es completa porque los ingresos reportados por el gigante bancario estadounidense -el segundo mayor del país por volumen de activos- han sido de 23.820 millones de dólares, algo menos que los 24.280 millones esperados por el mercado.
Así las cosas, el único dato macro previsto para hoy ha sido el de los precios de importanción, que han bajado el 0,3% frente al 0,2% esperado por los expertos. Con todo, lo que ahora mismo importa al otro lado del Atlántico es la futura orientación de la política monetaria. Y por lo que trascendió ayer en las Actas de la Fed, parece que vuelve otra lluvia de millones.
En efecto, el orgnanismo dirigo por Ben Bernanke sugirió que las medidas de política monetaria expansiva(el ya famoso 'quantitative easying') vendrán más pronto que tarde. Parece que será en noviembre, aunque no todos los miembros del organismo lo vean igual de claro. Por ejemplo, el presidente de la Fed de Kansas, Thomas Hoenig, consideró ayer que el alivio cuantitativo es una estrategia muy arriesgada, sobre todo cuando no hay objetivos claros.
Puede a que a Hoenig le asista la razón, al menos en teoría, pues los economistas saben a ciencia cierta que los aumentos del dinero en circulación tiene efectos sólo a corto plazo, porque en periodos largos de tiempo sólo se traducen en incrementos de la inflación. Eso es lo que le preocupa al funcionario, que se ha negado a mantener tan bajos los tipos de interés durantes las seis últimas sesiones. Pero Bernanke no parece dispuesto a defraudar al mercado.
Entre las empresas que hoy son noticia al otro lado del Atlántico, Amazon tiene una rebaja a 'mantener' desde 'comprar' por parte de Benchmark Co, mientras que la petrolera Chevron ha indicado que su beneficio trimestral se ha visto afectado por la depreciación del dólar. Además, Intel sube un 1% en preapertura tras presentar ayer unos resultados mejores de lo previsto.
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