El programa Manual de Convivencia Ciudadana busca dinamizar procesos de apropiación y práctica de la cultura ciudadana para la convivencia pacífica, con base en los principios del Manual de Convivencia Ciudadana, impulsando procesos pedagógicos y pactos comunitarios de autorregulación ciudadana y convivencia, que permitan la solución concertada d
e los conflictos cotidianos en la ciudad de Medellín.
El Manual de Convivencia, es una herramienta educativa y pedagógica para promover el ejercicio de las libertades y los derechos fundamentales, el cumplimiento de los deberes y el respeto de los derechos de los demás, para aportar a la construcción de una cultura ciudadana basada en el diálogo, la comunicación, la autorregulación, la legalidad y la dignificación de la vida.
El Manual surge en el 2004 a partir de una consulta popular. En su proceso de construcción participaron aproximadamente 18.000 ciudadanos y ciudadanas de Medellín, quienes determinaron los contenidos de esta herramienta de autorregulación ciudadana. (Decreto Municipal 1324 del 8 de junio de 2006).
COMPONENTES
Cultural y pedagógico: Actividades de asesoría y capacitación a grupos específicos de la ciudad con problemáticas de convivencia, mediante la utilización de metodologías pedagógicas, lúdicas, artísticas e interactivas. Este proceso está orientado al diseño de módulos de capacitación para formar multiplicadores del manual de convivencia.
Escuela de formación en competencias ciudadanas: Talleres en competencias ciudadanas para generar habilidades sociales que promuevan la convivencia. A través de ejes temáticos como: participación y responsabilidad democrática, pluralidad, identidad y valoración de las diferencias, resolución de conflictos, pactos vecinales de convivencia ciudadana y comunicación para la convivencia.
Pactos de autorregulación y convivencia ciudadana: El Pacto Ciudadano es un acuerdo que se construye de manera concertada entre ciudadanos, orientado a generar acciones para la convivencia pacífica. Los pactos de convivencia son el mecanismo por el cual las comunidades resuelven sus diferencias, procurando lograr beneficios y efectos recíprocos para resolver de una manera concertada los conflictos que se presentan en la cotidianidad.
Medellín se pinta de convivencia: Actividades de integración y promoción cultural para generar entre los habitantes de un determinado barrio, una mayor capacidad de apropiación e incidencia sobre factores sociales como la seguridad y la convivencia, a partir de acciones en espacios públicos de los barrios donde sea necesario legitimar la presencia del Estado y la apropiación por parte de la ciudadanía.Con estas actividades se busca potenciar las habilidades del trabajo en equipo, para construir mensajes e imágenes que por consenso cada comunidad decide trabajar, para transformar positivamente sus espacios mediante la combinación de expresiones estéticas relacionadas con elementos sociales como la identidad, la memoria y representaciones simbólicas de convivencia.
Niños y Niñas reconocen su ciudad: En articulación con el Metro de Medellín, la Policía Nacional, los Clubes deportivos Atlético Nacional y Deportivo Independiente Medellín y el programa Paz y Reconciliación, se busca promover entre los niños y niñas de las instituciones educativas, el comportamiento conviviente frente al fútbol y deslegitimar el uso de la violencia como forma de ser de un hincha.
Carnaval por la convivencia y la buena vecindad: Actividad organizada en conjunto con el Comité de Convivencia y el Comité Local de Gobierno, que pretende mediante la representación de comparsas, bailes y representaciones teatrales, que invocan elementos simbólicos sobre una temática en particular, sensibilizar frente a los conflictos más sentidos que se presentan en las relaciones vecinales, con el fin de promover reflexión entre los vecinos. El carnaval tiene además como particularidad su movilidad por diferentes sitios previamente seleccionados de acuerdo a las problemáticas identificadas.
Jornada de vacunación simbólica contra la violencia: Motivar en el imaginario de los niños y las niñas por medio de actividades simbólicas de representación fácilmente reconocidas, la asimilación de principios y valores de convivencia que puedan poner en práctica en la vida familiar, escolar y social.
Adolfo Martínez Muñoz: Coordinador de la Unidad Permanente de Servicios de Justicia (UPJ)
María Emperatriz Saldarriaga: Interventora
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