David Bassan, presidente de Coldwell Banker Venezuela, dice que "El alquiler en muchos países es una opción, pero en Venezuela es limitado. Cualquier intención de arrendar se afecta por los marcos legales" y señala que en el primer semestre del año se redujeron las operaciones de compra y venta de apartamentos en el mercado primario y secundario, y destaca que, por ejemplo, en la inmobiliaria la caída fue de 20%. Las intervenciones de desarrollos habitacionales, la menor capacidad de compra, las restricciones en los créditos y las regulaciones están afectando al mercado inmobiliario.
Expresa que las transacciones en el mercado primario han sido las más afectadas. "En un lapso de cuatro años los proyectos de viviendas se aceleraron, porque se aplicó el Índice de Precios al Consumidor en la preventa, pero cuando se prohibió ese indicador, los complejos bajaron su ritmo de producción. En Venezuela la inflación es elevada y ello incide en los costos de la construcción".
Expresa que las intervenciones de los desarrollos habitacionales también crearon limitaciones. "Las acciones de expropiación y ocupación de los complejos realizadas por el Ejecutivo en noviembre del pasado año, golpearon al mercado primario, y esa incertidumbre impactó en la demanda".
Aunado a las intervenciones otros factores incidieron en la reducción de las operaciones en la primera mitad del año, y entre esos aspectos se encuentran las restricciones a los financiamientos hipotecarios. El decreto de la gaveta hipotecaria solamente garantiza el acceso a las familias que perciben ingresos hasta 5 salarios mínimos (7.037 bolívares).
David Bassan señala que en el mercado secundario las operaciones también se desaceleraron, pero el descenso fue menos pronunciado que en el mercado primario. Ello se debe a que aquellos propietarios de inmuebles que estaban en alquiler han decidido ponerlos en oferta ante las regulaciones que se están preparando.
Comenta que ante la situación registrada con los proyectos de preventa se ha efectuado un reacomodo del sector. "Hace cuatro años 50% de las ventas que se efectuaban en la inmobiliaria eran del mercado primario, hoy esas operaciones representan 15%. El 85% de las transacciones corresponden al mercado secundario".
Para el presidente de la inmobiliaria en este segundo semestre el panorama del mercado inmobiliario no será diferente, "mientras no haya claridad la incertidumbre seguirá, pese a que la demanda existe".
David Bassan destaca que en el mercado de oficinas la caída de las transacciones no ha sido tan drástica y ello se debe a la mayor disponibilidad de espacios.
Luego de las acciones contra las casas de bolsas, esas instituciones optaron por vender oficinas y gran parte de esa oferta ha sido demandada por las industrias con las cuales el Gobierno tiene convenios.
Las compras, según los representantes del sector, han sido por parte de las empresas chinas, rusas, entre otras.
Bassan explica que en el caso de los locales comerciales las transacciones tampoco han tenido un descenso tan fuerte, debido a los comercios al detal.
El presidente de la inmobiliaria, expresa respecto al mercado de alquileres, que la reducción sigue y cada vez son menos las personas que están orientando las viviendas para el arrendamiento. "La caída en esta área sí ha sido drástica".
Actualmente, las autoridades han centrado sus regulaciones en los arrendamientos. En mayo entró en vigencia la Ley contra los Desalojos Arbitrarios la cual prohíbe las desocupaciones forzosas y autoriza el abandono del inmueble cuando el Ministerio de la Vivienda le haya conseguido un destino habitacional al afectado.
Adicionalmente, la Asamblea Nacional prepara la reforma de la Ley de Arrendamientos Inmobiliarios, que estaría lista antes del 15 de agosto, según los diputados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario