Para todas las interrogantes siempre podrán existir distintas respuestas que pospongan el inicio de dicha actividad, razón por la cual lo importante es buscar la respuesta que nos ayude a movernos y comenzar a dar los pasos necesarios para alcanzar lo que queremos.
En esta fecha se dan dos costumbres, la primera revisar todo lo que nos propusimos a finales del año pasado y ver que se logró y que no. La segunda es, escribir todo lo que nos proponemos hacer para el próximo año incluyendo aquellas actividades que quedaron pendientes, algo así como cortar y pegar.
Por tal motivo, el momento de empezar a ejecutar aquellas actividades que nos permitan lograr lo que queremos es HOY. Para dar esos pasos es necesario que las metas sean realizables, es decir objetivos alcanzables en el corto y mediano plazo que al sumarlos nos permita llegar al gran sueño.
Independientemente de la meta y nuestra condición, todo se puede lograr siempre y cuando uno sea consistente entre lo que se piensa y las acciones que se ejecutan.
Como se da en la mayoría de los casos, la meta puede ser incrementar nuestro patrimonio, disminuir las deudas u obtener libertad financiera. ¿Qué debemos hacer?, lo primero es pagarnos a nosotros mismos, tal como se ha sugerido en otras ocasiones, esto nos ayudará a tener una base que al principio será pequeña, pero que con el tiempo y la disciplina será un monto considerable.
También debemos ser conscientes de nuestros gastos, cualquier esfuerzo de ahorro será bien recibido, si tiene alguna rutina diaria de consumo en la calle (desayuno, almuerzo, merienda o cena), sustituya alguna por algo del hogar, tanto su bolsillo como su cuerpo se lo agradecerá.
Antes de comprar algo de manera impulsiva, hágase la siguiente pregunta: ¿Qué pasa si no lo compro?, si la respuesta es nada, probablemente no hace falta incurrir en ese gasto por ahora, si se evidencia una carencia, cómprelo!, buscando siempre la mejor alternativa.
Revise donde tiene su dinero, lo que no va a utilizar en el día a día no lo deje en la cuenta corriente, transfiéralo a la cuenta de ahorros, a pesar de haber tasas de interés reales negativas, el saldo que mantenga le ayudará a generar un poco más de intereses y por le ayudará a cubrir parte de los gastos de mantenimiento mensual de la cuenta.
Programe sus retiros mensuales, si se excede de los 20 movimientos que no generan ningún costo, los adicionales hágalos a través del cajero de su banco y evite incurrir en comisiones por usar cajeros de la red.
Estas son algunas de las actividades que podemos realizar de manera diaria que nos permiten optimizar nuestros recursos y orientar algunos montos adicionales a las metas que nos proponemos todos los años y de poco a poco, se irán logrando los resultados.
El momento de comenzar es ahora, no espere el momento ideal en el que tenga el monto mínimo para hacer una inversión, para pagar las deudas, para iniciar un negocio propio o cualquier otro plan que tenga en mente. Lo importante es dar el paso que lo acerque a cada uno de sus objetivos y mientras más rápido lo haga, mucho mejor. Aproveche y con parte de las utilidades establezca un monto mínimo para el inicio de esa gran meta.
Aristimuño Herrera & Asociados / Raymond Duarte Sandoval/NB
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