Esto significa que el Gobierno venezolano seguirá irrespetando los derechos de propiedad de los empresarios venezolanos, ya que la toma forzosa no obliga al pago del inmueble violentando así una vez más el art. 115 de la Constitución venezolana. El Presidente de Venezuela anunció que prepara una toma de galpones abandonados para utilizar esos terrenos en la construcción de edificios pequeños.
"Díganme dónde están los terrenos y galpones ociosos y los tomamos", dijo el jefe de Estado desde un acto en Magallanes de Catia en Caracas, en una clara y ociosa incitación al delito en contra de la propiedad.
Le encargó al presidente de Petróleos de Venezuela y ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, la definición de una lista de terrenos abandonados en Catia para tomar medidas ajustadas a las leyes vigentes. Dio plazo de una semana para contar con ese listado.
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