Ratificando el compromiso de los empresarios para construir una Venezuela productiva y eficiente capaz de contribuir a la solución de los problemas de los ciudadanos, el día de ayer culminó en Ciudad Guayana la LXVI Asamblea Anual de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras).“Estamos convencidos que el futuro se construye hoy, paso a paso y sin pausa, con el concurso de todos. La agenda no es otra que la patria libre con progreso social. Nuestra agenda es Venezuela”, dijo el presidente del máximo organismo empresarial venezolano Noel Álvarez, durante la lectura del documento final denominado “Una sociedad libre para la prosperidad”.
Durante este encuentro anual, el más importante de todo el país, fueron básicamente dos los temas de importancia más destacados por el sector privado: el rechazo a la política de expropiaciones y confiscaciones de empresas como causas de la destrucción del aparato productivo y la elección de una nueva Asamblea Nacional como el punto de partida para revertir precisamente este tipo de medidas.
Destrucción
Como líder empresarial, Noél Álvarez fue enfático al rechazar las constantes expropiaciones anunciadas por el Gobierno nacional, lo que considera una política que busca acabar con la empresa privada presionando con reiterados ataques al derecho de propiedad.
“No podemos aceptar que el objetivo central de la política económica del gobierno sea la destrucción del país. Cada vez que se confisca una empresa privada Venezuela pierde calidad de vida y oportunidades para construir un futuro esperanzador (…) Rechazamos que la vocería oficial esté llena de amenazas proferidas contra la estabilidad de las empresas. No podemos aceptar que a la larga lista de empresas destruidas se sumen otras más”, expresó el documento.
Para revertir la realidad actual que consideran menoscaba los derechos de todos los venezolanos, los empresarios resaltaron la necesidad de hacer respetar la constitución nacional como la máxima norma en la que se establecen todos los derechos ciudadanos.
En esa vía, Álvarez expresó que es urgente recuperar las libertades perdidas y resolver temas como la inseguridad, la escasez, el desempleo, la pobreza y en general otros problemas propios de un “proyecto económico insensato e inviable que pretende colocar a los venezolanos en el trance de un solo patrono que con la tiranía del monopolio quiere decidir cada una de las dimensiones de la vida pública y privada”.
Nuevo rumbo
Pese al panorama actual, los empresarios manifestaron su esperanza por la construcción de un nuevo rumbo en el destino del país, resaltando la elección de la nueva Asamblea Nacional como la tribuna ideal para la defensa de los derechos civiles.
Convocaron a todos los venezolanos, incluyendo los trabajadores, los estudiantes, las universidades, las academias, la iglesia y las instituciones emblemáticas, a apoyar “nuestra propuesta de construir juntos las nación que soñamos”.
“Los venezolanos decidimos enviar un mensaje claro y preciso a favor del pluralismo democrático a la vez que rechazamos con igual firmeza cualquier pretensión de seguir transitando por la senda del socialismo arbitrario y excluyente cuyos resultados económicos, sociales y políticos están a la vista”.
Tras la lectura de este documento los empresarios acordaron, entre otros aspectos, solicitar medidas de rectificación al sector público, impulsar alianzas que puedan mejorar las condiciones actuales de los diversos sectores productivos, realizar una declaratoria de emergencia del sector privado dada la política de las expropiaciones, y particularmente como ciudad anfitriona este año, promover la recuperación del Modelo de Guayana como pionero en el desarrollo sustentable del país
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