"Hasta el cierre del año pasado se habían otorgado 75.061 nuevas licencias para el Trabajo por Cuenta Propia y 8.342 se hallaban en proceso", afirmó en su portada el diario Granma, del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC), aseguró DPA.
Dentro de sus planes de "actualización" del modelo socialista cubano, el gobierno de Castro anunció en octubre la eliminación de más de 500.000 empleos en el abultado sector estatal y emitió en contraposición un paquete de leyes para facilitar el trabajo por cuenta propia, que permite abrir pequeños negocios en 178 profesiones diferentes.
Según Granma, del total de 83.403 personas autorizadas a ejercer el trabajo por cuenta propia o en trámite para obtener la licencia, el 68% eran desempleados, el 16% eran trabajadores y el 15% jubilados.
Las licencias más demandadas en los primeros meses, con un 22%, son las de "elaboración y venta de alimentos", que permiten abrir pequeños restaurantes, cafeterías y kioscos de meriendas. Le siguen con un 16% las licencias de "trabajadores contratados", que podrán trabajar para otros particulares, algo que hasta ahora no estaba permitido en Cuba.
Entre los permisos más populares están también, con un 5%, la transportación y carga de pasajeros y, con un 4%, los productores vendedores de artículos varios para el hogar.
Los nuevos pequeños empresarios particulares empiezan ya a poblar las calles de Cuba desde hace unas semanas. Entre otros, proliferan los pequeños puestos de venta de discos de música y películas, la venta de artículos de cocina como exprimidores o cacerolas o las pequeñas cafeterías y kioscos de venta de bocadillos.
El gobierno cubano prevé que en los próximos cinco años 1,8 millones de personas pasen al sector privado, que además del "cuentapropismo" incluye el trabajo en cooperativas de diversa índole o la entrega de tierras de cultivo en usufructo. La fuerza laboral en Cuba la componen unos cinco millones de personas.
En Cuba ya se habían impartido licencias para la apertura de pequeños negocios en los años 90, en medio de la grave crisis económica sufrida tras el colapso de la Unión Soviética, aunque poco después se abandonó dicha práctica. Hasta hoy, el 95% de la actividad económica en Cuba sigue en manos del Estado.
En abril próximo se celebrará el sexto congreso del PCC, que debatirá sobre el futuro modelo económico del país. En un documento preparatorio se propone entre otras medidas la unificación de las dos monedas que circulan en el país (peso nacional y peso convertible), la flexibilización de la compra-venta de alimentos y la eliminación de la libreta de racionamiento de alimentos.
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