Fedecámaras Bolívar:sectores industrial y forestal están en crisis en Guayana

 Desde el 2009, las alarmas del sector industrial en Guayana están encendidas. Con la merma productiva de las empresas básicas que se ha profundizado en los últimos dos años, las pequeñas y medianas industrias prestadoras de servicios y proveedoras de insumos han sufrido una baja en el nivel de contrataciones, así como la insolvencia producto de las limitaciones financieras. 

Para el presidente de Fedecámaras Bolívar, Guido Fratini, dos sectores atraviesan sus momentos más críticos: el industrial, dada la condición de las empresas básicas y el descenso productivo en cadena de las pequeñas y medianas industrias; y el forestal, debido a los permisos ambientales que han llevado a que estén "prácticamente paralizados al sur del estado Bolívar". 

La situación en 2011 no ha cambiado. El panorama de 2010 y 2009 se profundiza. Sostuvo que "las pymes están paralizadas de 60% a 70%, la deuda de los $1.500 millones se mantiene porque no han habido desembolsos y la conflictividad laboral afecta el panorama". 

"Las empresas han venido atravesando esta situación desde hace tres años y la crisis se refleja en todos los municipios", agregó. 

Cuando la zona industrial de Guayana empezó a crecer y a consolidarse, las opciones de empleo eran abundantes. Los portones no eran tomados como centros de protestas, "en la actualidad, el nivel de empleo ha caído bárbaramente y las pequeñas empresas no dudan en cerrar sus puertas". 

Fuerzas vivas de la región han sostenido conversaciones y encuentros debido al deterioro económico, pues ven cerca la amenaza de paralización de importantes obras como la construcción del tercer puente sobre el río Orinoco y la central hidroeléctrica Tocoma, ambas en Bolívar, y con retrasos por limitaciones financieras. 

"En ambas obras, están en riesgo 3.500 empleos", precisó. 

"La posibilidad de conseguir empleo en Guayana está cada vez más terrible, es crítica, ese es el principio del viacrucis económico de esta región", recalcó, por su parte, el presidente de la Cámara de Industriales y Mineros de Guayana, Fernando Goyenechea. 

Llamado al diálogo 

"Lo que está a la vista no necesita anteojos", aseguró el presidente de Fedeindustria Bolívar, Manuel Márquez, quien considera que es vital llamar al ministro de Industrias Básicas y Minería, José Khan, a sentarse con los empresarios a buscar estrategias para reflotar a las industrias básicas. "Hay que llamar al diálogo a los presidentes de las empresas básicas porque de lo contrario no tienen posibilidad de salir adelante a corto y mediano plazo". 

El primer vicepresidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Caroní y director de Fedecámaras Bolívar, Tomás Guerra Roa, dijo que la conflictividad laboral es la estocada final para las industrias básicas de Guayana, "de por si seriamente vulnerables por fenómenos concomitantes que las afectan como su baja productividad, problemas de gerencia, financieros, económicos, de suministros, estructurales, de atención a sus pasivos laborales y compromisos con proveedores de bienes y servicios", informó. 

"Se nos está acabando la capacidad de maniobras" como región pujante y alternativa no petrolera, por lo que consideró necesario reflexionar en torno al futuro de la región.